Ponencia presentada a las XII Jornadas de Producción Animal AIDA 2007, Sección 3: Nutrición y alimentación (mayo 2007). Publicada en un número especial de la revista ITEA.
En nuestro país, la intoxicación del ganado bovino por taninos hidrolizables (TH), asociada al consumo de hojas jóvenes de roble es una enfermedad frecuente que se presenta repetidamente cada primavera en zonas de media montaña (Mazzuchelli et al., 2000). A este respecto, conviene señalar dos aspectos. Por una parte, que el consumo elevado de hojas inmaduras de roble, y por tanto de TH, por parte del ganado vacuno se relaciona con la falta de disponibilidad de otros recursos alimenticios. Por otra, que aunque no hay ningún trabajo concluyente sobre la patogenia de este tipo de intoxicación, parece ser que los animales más afectados son aquellos con peor estado corporal.
Este trabajo se planteó con el objetivo de estudiar si la ingestión de una cantidad relativamente alta de hojas inmaduras de roble melojo (Quercus pyrenaica; hasta 5 kg de hojas frescas por animal y día) por el ganado vacuno resultaba necesariamente tóxica o si el hecho de que los animales partieran de un estado corporal aceptable (aunque no muy bueno) sería suficiente para evitar la intoxicación.
R. R. Doce y P. G. Toral disfrutan de sendas becas predoctorales del MEC y del CSIC (FPI e I3P, respectivamente). Este trabajo forma parte del Proyecto AGL2004-06076.
Peer reviewed