La erupción ocurrida en Lanzarote entre el 1 de septiembre de 1730 y el 16 de abril de 1736 es por su duración (2.053 días), extensión (200 km2) y volumen (3-5 km3) de materiales emitidos, y longitud de la fisura eruptiva (al menos 14 km), muy diferente del resto de las erupciones históricas de Canarias (últimos 500 años), que presentan estos parámetros con valores muy inferiores. La evolución de los magmas (con claras tendencias toleíticas), es asimismo única en el volcanismo histórico del Archipiélago. No había sido objeto, sin embargo, hasta ahora de un estudio específico que intentara su reconstrucción. Para la elaboración de este trabajo se ha realizado la cartografía geológica y la estratigrafía de detalle (a escala 1:10.000) de la zona, un amplio estudio petrológico y la correlación con los datos aportados por relatos de testigos oculares, entre ellos un manuscrito inédito. Se han diferenciado las principales fases de actividad, en función de cambios importantes en la composición de los magmas y en la relación con la fractura general que controla la erupción. El estudio petrológico y geoquímico, realizado sobre 51 muestras bien localizadas estratigráfica y temporalmente, muestra importantes cambios en los procesos de generación de los magmas y en el sistema de alimentación interna de la erupción. Los magmas evolucionan desde basanitas nefelínicas a basaltos alcalinos en la fase inicial de la erupción (7 a 12,5 % de fusión), y a partir de la 2ª fase desde basaltos alcalinos hasta toleitas olivínicas (13 a 20 % de fusión), con niveles de generación más superficiales. El modelo resultante del análisis de los elementos traza indica un claro predominio de procesos de fusión parcial. El carácter «anómalo» de esta erupción en relación con el volcanismo histórico de Canarias podría explicarse por la continuación de la erupción una vez finalizada la 1ª fase (unos 3-5 meses), al producirse la elevación y emplazamiento del frente de generación de magma a una profundidad intermedia a favor de una gran fractura. La definición de una serie de posibles escenarios permite simular y evaluar el impacto que la repetición de un fenómeno eruptivo de similares características podría imponer sobre la población e infraestructura actual de la isla.
The eruption that took place in Lanzarote between 1 September 1730 and 16 April 1736 differs from the normal pattern of the historic (last 500 years) volcanism of the Canary Islands. The duration (2.053 days), extension (200 km2), volume of materials emitted (3-5 km3) and the evolution of magmas towards olivine tholeiite compositions are quite unique in the historic trend of volcanism in the Archipelago. However, no specific study has been undertaken until now to attempt its reconstruction. In this work the detailed geologic mapping (on a scale 1: 10.000) of the area was carried out, in addition to a thorough petrologic study and the correlation of data provided by eye witness accounts, one of which is a hitherto unpublished manuscript. The main phases of activity have been differentiated as a function of important changes in the composition of the magmas and of the relationship of the eruption with a large (at least 14 km) fracture. The petrologic and geochemical study of 51 stratigraphically and temporally well located samples shows significant changes in the magma generation processes and in the internal feeding system of the eruption. Magmas evolve from nepheline basanites to alkali basalts (7 to 12,5 % melting) during the initial phase of the eruption and from the second phase onwards from alkali basalts to olivine tholiites (13 to 20 % melting), at shallower depths. Trace elements analysis indicates the predominant role of partial melting processes. The «anomalous» nature of this eruption in relation to the historic volcanism of the Canaries might be explained by the continuation of the eruption once the initial phase was completed (some 3-5 months), when the magma generation front was raised and placed at an intermediate depth along a large fracture.
Proyectos CSIC-CAICYT: 608/450 «Evolución geológica de la isla de Lanzarote» y 894A069 «Las erupciones históricas de Lanzarote en el contexto de un eje estructural activo».
Peer reviewed